Ya hemos enseñado muchas veces que el guerrero no es el que tiene las mejores armas o los mejores instrumentos de guerra, pero si no tienen un corazón guerrero no saldrán avante, en la vida cristiana ser un hombre una mujer que logra victorias para Dios, es un hombre que se va más en actitud que en armamentos o equipamiento.

 
2 Samuel 23:13-17 13Y tres de los treinta jefes descendieron y vinieron en tiempo de la siega a David en la cueva de Adulam; y el campamento de los filisteos estaba en el valle de Refaim. 14David entonces estaba en el lugar fuerte, y había en Belén una guarnición de los filisteos. 15Y David dijo con vehemencia: ¡Quién me diera a beber del agua del pozo de Belén que está junto a la puerta! 16Entonces los tres valientes irrumpieron por el campamento de los filisteos, y sacaron agua del pozo de Belén que estaba junto a la puerta; y tomaron, y la trajeron a David; mas él no la quiso beber, sino que la derramó para Jehová, diciendo: 17Lejos sea de mí, oh Jehová, que yo haga esto. ¿He de beber yo la sangre de los varones que fueron con peligro de su vida? Y no quiso beberla. Los tres valientes hicieron esto.

En este capitulo 23 habla de un grupo selecto de hombres de mujeres de Dios, los valientes de David, habla de un grupo de hombres de guerreros de Dios.

Que hacemos con armas con manuales de guerra, pero sin un corazón guerrero.

No se puede hacer de un hombre o de una mujer una persona guerrera sin cambiar su corazón y su actitud. Tenemos que entender que estamos en una guerra espiritual, no nos asustemos porque nuestro capitán es Dios, muchos de nosotros tenemos sueños y metas, Dios repartiendo y dando promesas, Dios da las promesas. Las promesas por un lado Dios las tiene que dar, ofrecer y por el otro nosotros debemos aprender a arrebatar las bendiciones, no se trata de robarle a Dios, ni de obligar o coaccionar a Dios. Las promesas hay están pero ¿Por qué no las estoy disfrutando? se trata de tomar con fe las palabras de Dios para nosotros.

Vamos a ver tres puntos:

1) Un deseo expresado

Vamos a tomar como comparación al rey David, porque la Biblia dice que somos reyes y sacerdotes.

David representa la intimidad y la comunión con Dios.

La ciudad de David Belén estaba sitiada por los filisteos, y David tuvo que salir corriendo a una cueva, salio huyendo a una cueva, el hombre que había vivido en Belén estaba metido en una prueba.

Y así es cuando nosotros estamos en una prueba, comenzamos a recordar las cosas de antes, y empezamos a suspirar, y vemos a la gente reírse solos y recordando, y el deseo de David era tomar agua del pozo de Belén.

No anhelaba la gloria, ni sus cosas ni sus posesiones, solo deseaba el agua del pozo que estaba a la puerta de Belén.

Lección…

Si David no hubiera expresado su deseo no hubieran sus hombres salido a arriesgarse. Aunque nuestros anhelos o deseos sean pequeños o detallitos son importantes.

- Como rey, David sabia que el podía pedir, y nosotros somos reyes Apocalipsis 5:10 10y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra.

Ellos escucharon la vehemencia del clamor de David. Debemos marcar el concepto que tenemos de nosotros mismos, ya no somos personas perdidas y solas, derrotadas o sin ningún motivo por estar en este mundo, somos reyes y sacerdotes que pueden pedir lo que desean en su corazón.

La Biblia no solamente promete conceder lo que necesitamos, sino nuestros suspiros y nuestros deseos más insignificantes.

- Lo que es importante para mí, lo es también para Dios

Hay reyes que han abusado del poder que tenían, David entendió que lo que era importante para él lo era también para los tres valientes, y Dios nos ama más que los tres valientes.

- David pidió algo difícil

En el Reino de Dios las cosas hay que pelearlas, los tres valientes tenían que entrar a una misión suicida, porque había una guarnición de soldados que los podían matar, tenemos que pagar el precio, lo que anhelamos cuesta, por eso debemos pelear por lo que queremos.

Cuando vemos a alguien que tiene éxito no es una casualidad es un logro.

Josué 1:6 6Esfuérzate y sé valiente; porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que la daría a ellos.

Dios le dijo a Josué que tenia que esforzarse, pero a la altura del capitulo 9 le ordena que sea valiente. No es si lo sentimos, o lo queremos, es que debemos, el esforzado siempre verá la gloria de Dios.

Eclesiastés 11:4 4El que al viento observa, no sembrará; y el que mira a las nubes, no segará.

Si estamos esperando las condiciones perfectas nunca vamos a terminar nada, nunca vamos a lograr nada; si estamos esperando que todo este en orden no vamos a lograr nada, porque lo que vale la pena cuesta, tiene que tener un grado de dificultad.

Por eso dice el sabio Salomón que cuando miramos las circunstancias y las dificultades nada vamos a lograr, porque en nuestra sociedad hay dificultades, pero muchas veces no aprovechamos el momento, las bendiciones de Dios vienen sobre nosotros, y a pesar que de lo que pase nuestro Dios está en el trono.

2) Una acción valiente (v 15 y 16)

- Irrumpieron: atacar, acción valiente, esto nos habla del carácter eminentemente ofensivo de la iglesia, no debemos defendernos, sino atacar. Estos tres hombres se levantaron en valentía, el creyente no está para defenderse, está para arrebatar y tomar en fe y en valentía todo lo que se nos ha prometido.

Mateo 12:29 29Porque ¿cómo puede alguno entrar en la casa del hombre fuerte, y saquear sus bienes, si primero no le ata? Y entonces podrá saquear su casa.

Lo que dice Mateo es lo que Dios espera de nosotros, que atemos al hombre fuerte y le hagamos estar quietos.

Nos han llamado a entrar y a tomar, no a pedir permiso para irrumpir.

Ahora dice que a la casa del hombre fuerte, nadie puede arrebatar ni saquear si no esta dispuesto a entrar a la casa del enemigo y quitarle lo que nos ha quitado, porque Jesús nos acompañará y nos hará vencer.

Cuando habla la Biblia de ejércitos habla de enemigos, pero cuando habla de muros habla de obstáculos.

Pero con nuestro Dios desbarataremos ejércitos, y que asaltaremos muros.
No solo debemos ser saqueadores sino que hay que ser asaltadores de muros, tomar posesión de un lugar establecido.

Entonces sea nuestra circunstancia muros o ejércitos tenemos a nuestro Dios de nuestra parte para vencer.

- Tomaron: No solamente irrumpieron sino que tomaron, lo que significa poseer, Belén era del pueblo de Israel, era un pozo que pertenecía a Belén. Ellos tomaron lo que les pertenecía, la salud nos pertenece, la paz, todas las bendiciones nos pertenecen, ellos sabían que en Belén estaba todo lo que necesitaban.

Belén significaba casa de pan, así que todo lo que es bueno es nuestro. Nosotros tenemos nuestro Belén, nuestro lugar nuestra casa de provisión.
¿Cuál es la Belén que estamos añorando? Es nuestra esa Belén. En casa de pan no hay ausencia de bendición, si Jesús está en nuestro corazón ahí está nuestra Belén.

3) Una reacción inesperada

Los tres valientes estaban felices por lo que habían hecho, esta agua significaba la sangre de los valientes de David.

- El rey valoró la acción: No fue un menosprecio, porque David sabia que lo mejor que podía hacer era darle esa agua a Dios, y este es el principio, si venimos a la presencia de Dios con lo mejor estaremos actuando bien, porque el único y sabio Dios merece toda la gloria y el honor.

- Como rey David sabio que lo merecía: Como reyes y reinas sabemos que merecemos lo mejor, ahora Dios merece lo excelente y lo precioso, como Rey Dios merece lo mejor, si queremos lo mejor para nuestra vida Dios tiene que tener lo excelente.

- Como rey David sabia que debía ofrecer lo mejor: Los regalos del rey deben ser dignos del rey, no solamente de la persona que lo van a recibir, sino de nosotros, nosotros debemos darle a Dios lo mejor de lo que tenemos, David no quiso beber el agua.

- El rey reconoció la acción: Primero porque fue una acción de fe, Eso llama la atención de Dios, eso mueve la mano de Dios hacia nosotros. Debemos dar pasos de fe, toda acción de fe provoca una acción de Dios. Dios siempre honrara la acción de fe.

Dios no pasa por alto las acciones de su pueblo, El sabe todo lo que hacemos por El, El es Dios de recompensas de bendiciones, Dios siempre nos va a pagar con creces.

Dios siempre sabe lo que necesitamos y lo que está en nuestro corazón, por eso debemos acercarnos a su presencia con confianza y saber que todo lo que anhelamos está delante de la presencia de Dios, y que además suplirá todas las cosas que necesitamos porque nos ama.

Y si tu nunca has aceptado a Jesús como tu Señor hoy es el día en que puedes hacerlo, solo ora con nosotros ante la presencia de Dios: Señor te recibo hoy como mi Señor y mi Salvador y te doy todo lo que soy para que me uses y sea yo tu hijo para siempre, en el nombre de Jesús abro las puertas de mi corazón para que entres y seas mi Señor para siempre, amén.
JESUS TE AMA

Autor: Pastor Hugo Solís