Por Jeanne Guyón
Poema escrito bajo riguroso destierro.

Mi Señor, cuán llena de dulce melodía:

¡De destierro atrás dejo mis días!
More donde more, a tu lado me hallaré,

Sea cielo, tierra, o mar, allí te esperaré.

Para mí no hay lugar ni tiempo;

Pues mi país no tiene cuerpo;

En calma y sin cuita puedo estar

Pues en cualquier orilla le habré de contemplar.

Mientras busquemos o dejemos atrás lugar,

En ninguna felicidad el alma tendrá hogar;

Mas con Dios nuestra senda para guiar,

Igual gozo es, quedar o marchar.

Si donde Tú estás no pudiera yo habitar,

Terrible destino en verdad contemplar:

Mas regiones remotas no puedo nombrar,

Segura de en todas a Dios hallar.