Principios Básicos de Victoria

Durante años hemos estado oyendo a líderes y ministros decirnos que no nos preocupemos, que en Cristo somos más que vencedores y que la victoria ya es nuestra y que el diablo está derrotado. Y es cierto, esa enseñanza es genuina, salvo por una pequeña condición: que estemos sometidos al señorío de Cristo, y que entendamos que esa victoria tiene que ver con la iglesia genuina, y puede incluir o no a quienes la conformamos. Porque Dios es lo primero y todo lo demás es añadidura.